Cafayate: Crece el pánico de Rita Guevara ante los avances de la Comisión Investigadora

POR: REDACCIÓN – www.ernestobisceglia.com.ar

Una de las características de la intendente de Cafayate, Rita Guevara, ha sido siempre el desdén y el relajo para tratar a las personas que no coincidían con ella. Con un carácter totalitario, formó una troupe de funcionarios de medio pelo que demostraron su incapacidad para las funciones asignadas. De hecho, casi todos tuvieron salidas conflictivas con la mujer de los múltiples lentes.

Con la Guevara, Cafayate dejó de ser un municipio y se convirtió en un feudo, donde los que no coincidían con su pensamiento eran perseguidos impositivamente, sancionados en sus comercios o no atendidos en sus necesidades como vecinos.

Este modo autocrático de manejar el poder tuvo su primera expresión apenas asumir cuando pretendió que el Concejo Deliberante le otorgara la suma del poder para manejar discrecionalmente el municipio y los recursos económicos. Obviamente, ese pedido fue rechazado.

Pero este sistema de favores a los amigos comenzó a verse palmariamente cuando el Concejo Deliberante, comenzó a revisar las cuentas públicas, especialmente, las de Serenata de Cafayate 2024, donde la cantidad de irregularidades detectadas terminó con una presentación ante la Auditoría General de la Provincia.

Pero la magnitud de los desajustes administrativos, sumados a sospechosos movimientos que se habrían advertido en el informe de Serenata a Cafayate 2025, junto a otros movimientos financieros que serían incorrectos (por llamarlo educadamente así), determinaron que el Concejo Deliberante formara una Comisión Investigadora, que habría comenzado a descubrir lo que serían serias y groseras irregularidades además de facturaciones amañadas y “empresas” nacidas –vaya casualidad-, justo para Serenata. En otros casos, habría funcionarios participando de negocios con el erario público, y lo más grave, una cantidad importante de millones de pesos en fondos fiduciarios donde los papeles no cuadrarían para nada.

Entre esos dineros colocados no se sabe bien dónde, habría montos provenientes de partidas giradas por el gobierno de la provincia.

Con la soberbia y la impunidad que caracterizan a la Guevara, en su momento, “La Rita”(como la llama su entorno), saludó públicamente la formación de la Comisión Investigadora, con un mensaje que escondía una carga irónica y desafiante.

Del feudo al escándalo, El avance de la Comisión

Pero  cuando la Comisión Investigadora, comenzó –como quien pela una cebolla- a levantar las capas de papeles y comprobantes, a la vez que se develaban movimientos que no sólo atentaban con la Ley de Contabilidad de la provincia, sino que en algunos casos podrían hasta ser tipificados como lisa y llanamente delitos penales, el nerviosismo comenzó a ganar al gabinete y a la propia Guevara.

La olla a presión

Según nuestras fuentes confiables dentro del municipio, señalaron que a medida que los papelitos descubrían agujeritos, comenzaron las acusaciones, los gritos y hasta las renuncias dentro del círculo municipal. Y todo se convirtió en una olla a presión que tuvo episodios de violencia verbal de tal magnitud que se cuenta que hubieron descompensaciones y enfermeros ingresando al edificio municipal para soplar a algunos funcionarios, incluso a la propia intendente que habría sido presa de un brote, posiblemente de psitacosis.

El detonante del “tole-tole” municipal, habría sido la comparecencia de una contadora que no supo explicar porqué “2 más 2, le da 18” en las cuentas públicas, además de que no estaría habilitada para actuar en el municipio, lo que provocó la ira de su colega, López; además de que se habría comprobado que profesionales asesores habrían contratado a sus propios empleados con dineros del municipio, o se habrían hecho compras directas donde aparecerían familiares directos de miembros del gabinete, entre otras irregularidades más graves que por una cuestión de preservar la investigación nos vemos impedidos de mencionar.

Desesperación final

Todo esto, llevó, primero a que la Guevara, presa ya del terror, se presentara en el Concejo Deliberante, a alarido pelado un día viernes ¡Cuando no están los concejales!, invadiendo un espacio  institucional ajeno, sin que se haya comprobado aún si acaso no faltaría alguno de los papeles rojos que estarían denunciando las dichas irregularidades.

Ahora, la Guevara que reconocía la validez de la Comisión Investigadora, porque «está en la Carta Municipal» (sic), y que decía que «me parece perfecto que investiguen», ahora rechaza lo actuado por los ediles, además de haber falseado la verdad diciendo que no le devuelven los informes, cuando es el Ejecutivo que ella preside quien jamás respondió a un informe y tampoco quiso conformar el presupuesto municipal según las observaciones del Concejo Deliberante.

Al parecer, la cosa se habría puesto ya tan colorada, que ahora, la Guevara, que antes aplaudía la formación de la Comisión Investigadora, ahora firmó un Planteo de Previo y Especial Pronunciamiento Nulidad Reserva, ante el Concejo Deliberante.

Desconocemos el grado de formación de los asesores jurídicos de la Guevara, pero ya “prima facie”, el documento emitido por la intendencia carecería de todo sustento legal, toda vez que el Ejecutivo no puede ni debe proceder dictando cuál debe ser el temperamento de otro Poder, como es el legislativo municipal.

La redacción del dicho documento ha sido vista como un gesto de desesperación por parte del Ejecutivo ante lo que podría ser una inminente denuncia que podría comprometer su continuidad en la función pública.

Como suele decirse: ¡Ampliaremos!