Reconstruir los partidos políticos y fortalecer a la democracia, es el camino que le queda a Gustavo Sáenz

POR ERNESTO BISCEGLIA – www.ernestobisceglia.com.ar . – El General Juan Domingo Perón, dijo: “A esto lo arreglamos entre todos, o no lo arregla nadie”. Y la realidad nos dice que la política salteña está desarreglada. No es posible hablar de democracia sin partidos políticos. Y el triunfo de La Libertad Avanza en la Capital del pasado domingo sólo puede contarse como tal porque no tuvieron que competir con nadie. Así, como el Mar Rojo, el electorado se abrió en dos: Los libertarios versus los que ya se cansaron de los Lamberto, los Kripper y toda esa murga. A eso, hay que sumarle el descenso de votantes, el resultado no podía ser otro.

En efecto, aguzando el sentido analítico, hay que admitir que la sociedad se expresó más en “contra de” que a “favor de”. ¿Cómo es esto? Sencillo, la oferta electoral estaba deprimida y quizás quienes asesoran al gobernador no supieron advertir y traducir algo que ya viene hace rato flotando en el ambiente: el hartazgo de la gente a ver a los mismos muñecos en el escenario. Personajes en su mayoría intrascendentes, mediocres, payasescos algunos incluso.

A riesgo de causar enojos, supongo que alguien tiene que decir alguna vez las cosas como son. Y estas pasadas elecciones han servido de jubilación para muchos personajes que ya no van más. También hay que incluir el fin de ciclo de todo un periodismo rentado que terminó convertido en páginas salpicadas de operaciones baratas. Algo no se comprendió bien, los candidatos no son para siempre y el periodismo no es para el ultraje. En ambos casos, ha quedado demostrado que los ciudadanos ya piensan más de lo que algunos asesores creen.

La vieja política está terminada. ¿Qué se hace ahora?

Pensamos, sinceramente, que el mejor camino y el que le dará un lustre de bronce al gobernador, Gustavo Sáenz, es ir por la reconstrucción de los partidos políticos de Salta. ¿Qué cuadragésimo aniversario de la democracia celebramos sin partidos políticos? ¿Qué clase de ensalada cívica es esta de los Frentes? Hay que recuperar la identidad de los partidos políticos y para Sáenz, ése sería el pergamino más egregio con que pasaría a la historia. De hecho, sería ingresar a la historia grande de la política.

Recuperar a la Unión Cívica Radical

Conviene recordar que los dirigentes más conspicuos y reputados del radicalismo salteño fueron los que armaron y encolumnaron a los correligionarios en el año 2019 para apoyar la primera candidatura de Gustavo Sáenz a la gobernación. Recordará el gobernador, aquellos encuentros en Metán, Orán y algunos en la Capital, donde empanadas y locro mediante, se animaba a votar por su figura. Esa movida resultó en algo más de 30.000 votos para el hoy gobernador.

Lamentablemente, la “picardía” y deshonestidad intelectual y partidaria de un personaje abyecto como, Miguel Nanni, cuyo funeral político se acaba de consumar este fin de semana, terminó destruyendo a la Unión Cívica Radical. Fraudes electorales, suspensiones masivas de afiliados y expulsiones amañandas -incluso de correligionarios ya fallecidos-, le permitieron a este malandra de Nanni, mantenerse al frente de un partido vacío pero rentable para él y sus albaceas. La histórica Lista 3, terminó siendo eso mismo, tres tipos que se encaramaron y liquidaron una historia política centenaria. Todavía adeudan, Nanni, y sus cómplices explicaciones sobre los fondos millonarios del partido que sabrá Dios qué pasó.

Reconstruir a la Unión Cívica Radical y formular acuerdos políticos sustentables, le aportaría al gobernador, Sáenz, ya una valiosa ayuda.

El Partido Renovador de Salta

Llegó a ser la segunda fuerza electoral de la provincia. Tal fue su importancia que logró vencer alguna vez nada menos que a Roberto Romero. El PRS aportó a la política de Salta figuras consulares. Todo era bueno hasta que accedió a la presidencia de ese partido, Andrés Zottos, un mediocre “pillapollos”, que no titubeó en entregar la tropa para hacerse de la vicegobernación junto a ese gran destructor de la provincia de Salta, que fue, Juan Manuel Urtubey. Nadie se engañe porque nos respalda la historia, o ¿Acaso alguien puede negar que Urtubey superó al propio Atila, porque por donde pisó su caballo (Tío Julio), no volvió a crecer la hierba?

En este punto, me permito comentar una anécdota personal. Cierta vez, acompañaba yo a esa eminencia que fue, Monseñor Justo Laguna, a una entrevista en Canal 11. Mientras esperábamos, acertó a pasar Zottos, a quien se lo presenté a Laguna. Conversaron unos minutos y luego, Monseñor Laguna, me dijo: “¿Este es el vicegobernador? Si, respondí. Y Laguna agregó: “Es muy elemental. Parece un débil mental”. Juro por mi salvación eterna que la escena fue literal. Tenía razón, Laguna…

Después de Zottos, vinieron otros no menos dañinos para el PRS, que incluso hasta le cambiaron el nombre al partido y le pusieron PARES…, ¿Sería la sigla de “PAjarracos RESucitados”? Hoy, la sede del extinto PRS, entiendo, se alquila para reuniones sociales o evangélicas, algo así.

¿Cuánto podría aportar el PRS en una coalición bien formada al gobierno del Dr. Sáenz? Pensamos que mucho.

Acápite aparte, claro está que para que este procedimiento funcione, es imprescindible contar con un ministro de gobierno capacitado, inteligente, preparado y que entienda de política. De lo contrario, estaremos como en alguna fábula de Esopo, hablando con un asno.

De la izquierda mucho no podemos hablar, porque hablar de izquierda en Salta, es referirse inmediatamente al Partido Obrero, una Pyme familiar, no muy distinta de Salta Independiente. Dos expresiones que también han visto el “Consumatum ex”, este domingo. Los jóvenes dirían “Ya fueron”.

El Partido Justicialista

¡Y aquí está la joya de la corona! ¡Es IMPERIOSO RECUPERAR EL PARTIDO JUSTICIALISTA! ¡La Casa peronista debe volver a ser de los peronistas! Porque junto al PO y el SI, el PV, también figura ya en el obituario de la democracia de Salta. No pueden continuar kirchneristas al frente de la Casa del PJ, porque -si bien fue desde un principio lo fue-, ahora más que nunca ya no es intervención, sino USURPACIÓN.

¿Cómo se entiende que un grupo de salteadores de la política que ingresaron por la ventana estén copando el sello, el escudo y la gloria del peronismo de Salta? Miremos a la historia política de esta provincia y comprobaremos que el peronismo fue como el brazo metalúrgico de Lorenzo Miguel, una fuerza de hierro.

Nadie se equivoque, porque vendrán los distraídos antiperonistas a decirnos que todos fueron unos truhanes, unos forajidos, unos matones y unos “chorros”. Sí, como en toda familia, hay de todo. Pero nadie muestra al pariente borracho y sin bañarse en una fiesta. Con la democracia ocurre igual. ¿Por qué habría que continuar proponiendo como candidatos a los malvivientes? Habiendo ¡TANTA GENTE VALIOSA EN EL PERONISMO!

Soy un amante de la paz, del diálogo y de la concordia, pero estoy convencido de que la solución del peronismo, del verdadero peronismo de Salta es ¡Tomar la Sede del PJ! Establecerse allí hasta que caiga la usurpación. Y esto por dos razones prácticas. Primero, porque perdieron las elecciones calamitosamente. Y segundo, porque si por la fuerza tomaron el PJ, ¡Por la fuerza hay que recuperarlo! Y si quieren venir, qué vengan “les presentaremos batalla”. Aunque está última frase como aquella “No los voy a defraudar”, no terminaron siendo felices.

¿Dónde están esos dirigentes peronistas de fuste que aleccionan desde las redes sociales? ¿Dónde están los dirigentes de bases y las matronas que amasan esos ricos bollos y arman deliciosas empanadas? La historia nos ha enseñado que el 17 de Octubre, sirvió para recuperar derechos. Pues bien ¡Vamos por una pueblada peronista a la salteña para volver a tener partido! (Como si yo fuera peronista…, pero soy demócrata y apoyo la moción, obvio).

Final con “Allegro Maestoso”

Para los no iniciados, el “Allegro Maestoso”, es una indicación de tempo y carácter en música clásica, caracterizado por ser, rápido, alegre y con solemnidad. Así hay que obrar en este tiempo con la política.

Porque, hemos de preguntarnos: ¿Si estos partidos políticos hubieran estado funcionando, podría La Libertad Avanza, haberse alzado con un triunfo tan preclaro en la Capital de Salta? ¿Podrían estar pensando y diciendo que en el 2027, se van a “pelar la gobernación”? ¿Sería tan sencillo derrotar a un gobernador y a todo el concierto político fortalecido? Tiendo a pensar que no.

Pero la cosa no es tan fácil. Esto no es soplar y hacer botellas. Entiendo, es necesario iniciar un tiempo de CONSENSOS. De comenzar a dialogar con los dirigentes más notables de cada partido. Cuando digo “dirigentes notables”, digo de figuras consolidadas ante la sociedad, verdaderamente representativas, no los monigotes que autoperciben “dirigentes” cuando no dirigen a nadie porque no existe la militancia.

Debo pedir las disculpas del caso al señor gobernador, Gustavo Sáenz, por el atrevimiento de sugerir tales ideas, pero si los ciudadanos no aportamos ideas y no nos jugamos públicamente por ellas, hacer oposición de café es fácil, aunque costoso, porque el café ha vuelto a subir. En este entender, es que uno, quizás como Juan en el desierto, se atreve a parlotear de esas cosas, simplemente, porque vamos en bien del conjunto social. Sí, creo firmemente, que un diálogo político que reconstruya a los partidos políticos de Salta, sería el gran manifiesto político, el gran legado cívico, que el gobernador bruñiría su nombre en la historia política de Salta.

Por lo menos, así, lo veo yo, diría aquel. –