Requiem por Juntos por el Cambio en Salta: Los muertos que dejó Miguel Nanni y que ahora necesita resucitar
La Teoría del Karma parece haberse aplicado en la persona de Miguel Nanni, supuesto dirigente de la centenaria Unión Cívica Radical, quien para asegurarse la paz de los cementerios dejó fuera de combate a decenas de correligionarios los que ahora podrían salvarle la vida política… si aún le queda alguna.

POR ERNESTO BISCEGLIA.- Vamos a decirlo como es, desde hace más de una década, la Unión Cívica Radical de Salta ha sido el botín de un solo dirigente, Miguel Nanni, a quien hay que reconocerle una extraña habilidad para saber negociar el sello de la histórica “Lista 3” en beneficio propio y de un séquito que ya lleva usufructuando dos periodos en la Cámara de Diputados de la Nación.
Durante la presidencia de Nanni, el radicalismo de Salta vivió hechos insólitos, como el de tener ondeando en su frente la bandera amarilla de Alfredo Olmedo y –dicen las malas lenguas- que hasta habría sido aguantadero de votos del partido de la familia Biella. En ese tiempo se negoció a la UCR de Salta para favorecer a Juan Manuel Urtubey y al momento del recambio a Gustavo Sáenz, con apariciones un tanto apretadas de Nanni en las fotos junto a Juan Carlos Romero a quien había enviado a jubilar.
Haciendo historia, hay que recordar que cuando Gustavo Sáenz lanzó su candidatura a la gobernación con un histórico desafío: “Si no gano me voy a mi casa”, cosa que nadie antes había hecho, un sector del radicalismo liderado por el histórico dirigente, el Dr. Luis “Lucho” Zavaleta, decidió apoyar abiertamente la candidatura de Sáenz organizando reuniones en la Capital y acompañando al entonces candidato a otras presentaciones en el interior de la provincia.
Un supuesto “Comité de ética” del radicalismo a instancias de Miguel Nanni –todo hace pensar que habría sido así-, decidió entonces sancionar a Zavaleta y a decenas de correligionarios con una suspensión y a otros con la expulsión por haber apoyado a una lista que no era radical, llegando al papelón de enviar cartas documento a ilustres radicales ya fallecidos. ¡Caramba! Luego de ver la bandera de Olmedo en el Comité de Mitre 653 ¿Qué medida habría que haber tomado con el presidente del partido entonces?
Graciosamente esa suspensión duraba hasta el mes de marzo del presente año de modo que durante dos años Nanni & Cía. se aseguraban el campo orégano para hacer y deshacer, cosa que efectivamente hicieron.
Pero llegó el año 2023 y todo indicaba que Juntos por el Cambio sería la nave insignia de Miguel Nanni que lo llevaría a lograr un tercer periodo en la Cámara de Diputados donde dicen que la primera promesa de campaña sería aprender a leer en público y de corrido. Pero –para hacerla corta-, como aquella vieja canción de “Los Iracundos”, alguien entonó “los marineros queremos bajar”… y se bajaron. Partieron los principales referentes a formar un Frente un tanto extraño, variopinto y pintoresco, que Dios dirá que suerte tendrá. Ergo, Miguel Nanni se quedó con su juguete llamado “Juntos por el Cambio” pero solo con su supuesta candidatura a gobernador de alguna supuesta Unión Cívica Radical y con una supuesta compañera de fórmula (Inés Liendo) que dicen algunas voces estaría por saltar a la sartén donde se cuece ese revuelto llamado “Avancemos”.
Paradójicamente, lo único que podría salvar a Miguel Nanni del naufragio total en este momento sería levantar inmediatamente la suspensión de los correligionarios afectados, pedirles disculpas por el “error administrativo” y convoca a una Convención Extraordinaria que aprobara una alianza con Gustavo Sáenz para competir con una Unión Cívica Radical fortalecida en las próximas elecciones del mes de mayo.
Porque una cosa es que el Frente “Avancemos” pueda decir que lo integra “un sector de la UCR” ¿Quién, cuál es el dirigente de “ese sector”?, a que una Convención Extraordinaria y urgente del radicalismo de Salta converja unida, recuperando sus legítimas banderas, con autoridades surgidas del voto de los radicales, a que se extinga lánguidamente, con algunos votando al kirchnerismo de “Avancemos”, otros colegiados con Sáenz y algunos espíritus levantados de las tumbas a Miguel Nanni.
Es ahora, o nunca. Como diría el Dr. Alfonsín “Nuestros grandes muertos” lo reclaman.-