Departamento de La Caldera: “Si tuviéramos una Junta de Participación Vecinal ya tendríamos agua y seguridad”
Ante el fracaso de las gestiones municipales de La Caldera y Vaqueros en materia de provisión de agua y protección ciudadana, queda demostrado que es necesario buscar otros caminos de solución. La Participación Vecinal es clave para lograr municipios sustentables. Los vecinos no podemos dejar en manos de políticos acabados las decisiones vitales.

POR ERNESTO BISCEGLIA.- Los intendentes de La Caldera y Vaqueros han demostrado ya dos cosas: la incapacidad para resolver los temas más graves de la comunidad como el agua y la seguridad, y segundo, que su tiempo político está terminado.
Lamentablemente, la falta de grandeza personal de estos dos intendentes los lleva a querer continuar enquistados en el poder. En La Caldera, Diego Sumbay, pretende reelegirse cuando tiene por resultado de tres años una colección de fracasos sucesivos que hoy se evidencian con el malestar de los empleados municipales que ha sido la constante durante todo este tiempo.
En Vaqueros, Daniel Moreno, apoyado en consejos de individuos descalificados ha llevado en su tercera gestión al barranco todo lo hecho anteriormente y para colmo expresa que no será nuevamente candidato a intendente “Porque quiero descansar” y se presenta como candidato a diputado. ¿Quiere descansar en la Cámara cuatro años pagado por los vecinos?
La cuestión es que los vecinos ya no podemos dejar en manos de políticos que tras décadas han demostrado su incapacidad para gestionar los problemas más urgentes. ¿Cómo se entiende que el Departamento de La Caldera, siendo proveedor de agua para la Capital, los vecinos no la tengan?
¿Continuaremos venerando un cartel que le da la bienvenida a cloacas que jamás llegaron?
¿Seguiremos viendo cómo los intendentes se reúnen con autoridades y policías mientras roban a los vecinos a metros de donde ellos dicen estar arreglando la cuestión de la seguridad?
¿Continuaremos viendo fotos de los intendentes señalando planos de un puente que a meses de terminar la gestión ya se ha prometido tres o cuatro veces y muchos ni siquiera saben por dónde pasará?
¿Volveremos a ver el cuarto anuncio en dos años del lanzamiento del “Polo Tecnológico” para Vaqueros?
¿Nos vendrán a inventar otro “Sistema de Vigilancia Vecinal” con cámaras por Internet que nunca llegaron a funcionar?
Son estos apenas los temas principales que nos afligen y que a esta altura del año y de la gestión no dudamos que no tendrán respuestas porque ya están pensando en la campaña y luego, seis meses más tarde estarán entregando el mando. Adiós a la expectativas.
Una Junta de Participación Vecinal
La política municipal moderna pasa ahora por la “Gestión Asociada”, los vecinos, los actores sociales en trabajo conjunto con el Concejo Deliberante y el Intendente. No es lo mismo que vaya uno de estos intendentes a ver al ministro de infraestructura –por ejemplo- donde el diálogo sería más o menos:
- ¡Hola, che, qué haces!
- Y… vengo a joderte por el tema del agua. Los vecinos ya están muy calientes.
- Mañana vamos y hacemos una foto con el plano y listo.
A que un grupo de vecinos comprometidos vaya por el ministro, incluso el gobernador, los legisladores, a gestionar sus temas.
Se trata de poner a debate en esa Asamblea de Vecinos los temas urgentes y llevarlos adelante. Porque no es lo mismo que un funcionario tome un café con un intendente a que un grupo de vecinos se reúna a plantear sus inquietudes.
Estamos en pañales en esta cuestión de la Participación Vecinal, pero como todas las cosas siempre tienen un inicio y estamos ya en ese camino de formar cuadros de participación vecinal, para que todo sea más transparente, más palpable y más posible.
El tiempo de los intendentes feudatarios se ha terminado. Vamos por la Organización vecinal.